La resolución, que según fuentes de la Casa Rosada sería firmada en las próximas horas por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, es un punto a favor del ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, Aníbal Fernández, en su lucha de poder con el titular de la Sedronar, José Granero. LA NACION intentó hablar sobre el tema con éste, pero al cierre de esta edición el funcionario no pudo ser ubicado.
Anoche, la División Búsqueda de Personas, dependiente de la Superintendencia de Investigaciones de la Policía Federal, allanó la droguería, en el barrio Santa Rita, en la que trabajaba Vilán y el departamento que alquilaba en la zona de Las Cañitas.
En Unifarma, situada en Juan B. Justo al 6100, los investigadores secuestraron dos impresoras y, por lo menos, cuatro cajas con documentación, informaron voceros del caso.
El viernes pasado, la Gendarmería Nacional había allanado en Pilar un departamento alquilado por Sebastián Forza, de donde secuestraron una computadora, seis automóviles y dos motos. La muerte de Vilán, que tenía 34 años y era cliente de Forza, una de las víctimas del triple crimen, es investigada por el fiscal de instrucción porteño Marcelo Solimine. Las empresas de Vilán y Forza son investigadas en causas judiciales por la adulteración de medicamentos. Ambos empresarios aportaron dinero para la campaña presidencial de Fernández de Kirchner.
Vilán se habría arrojado el domingo pasado del noveno piso del edificio de avenida San Juan 4129. Era el departamento de sus padres. En ese momento estaba con una de sus hermanas, informaron fuentes policiales.
El suicidio, según dijeron a LA NACION fuentes policiales, estaría confirmado. Pero el fiscal Solimine quiere investigar si el empresario farmacéutico decidió arrojarse al vacío inducido por alguna otra persona, explicaron voceros judiciales citados por la agencia DyN.
Antes de quitarse la vida, Vilán escribió de puño y letra: "...si realmente están investigando, por favor háganlo bien, pero no confundan las cosas".
Reunión
Ayer, el abogado Miguel Angel Pierri, que representa a los familiares de Leopoldo Bina y de Damián Ferrón, las otras dos víctimas de la masacre de General Rodríguez, confirmó que Bina y Forza se reunieron el 7 de este mes, el día de la desaparición, a las 11, en una confitería del barrio de Liniers.
Después, en la zona de Quilmes, se habrían encontrado los tres para tener una reunión con alguien. Luego desaparecieron.
Fuente/ www.lanacion.com.ar
