Una joven de 25 años, fue atacada por tres delincuentes para robarle el celular y la cartera, hecho que termino con golpes a la damnificada y raspones en el cuerpo de su pequeña hija.
La agredida, dio a conocer a Diario C, que se encontraba en la avenida Ocampo esperando al marido que fue en busca de su vehículo.
Para aminorar la espera, y por cuestiones de trabajo, fue a un ciber que se encuentra por la avenida mencionada paralelo al pasaje Tadeo.
En el momento en que se condujo con su hija de unos 4 años hasta el local, fue sorprendida por tres delincuentes que en principio la empujaron para arrebatarle el celular.
Pero la joven mamá, llevaba entre sus hombros una cartera, que es el elemento principal de los ladrones a la hora de cometer robos callejeros.
Para arrebatarle la cartera, los ladrones tendieron a empujar a la pequeña al suelo lo que le originó raspones en su cuerpo. “Lo primero que hice fue tirarme a cubrir a mi hija por miedo a que la lastimen”, relató la damnificada.
A partir de allí, vivió un momento de horror, miedo y confusión, al principio según contó, se encontraba en un estado de shock por ver a su hija en el suelo y llorando, motivo por lo que la mujer no pudo comprender la pretensión de los malhechores.
La damnificada, no percibió que tenía su cartera casi adherida al cuerpo y que los ladrones no podían arrebatarla, esto llevó a la irritación de los asaltantes que de inmediato comenzaron a dispararle a golpes de patadas en diversos sectores del cuerpo, produciendo hematomas en las manos, las piernas y el brazo de la joven.
“No reaccionaba, me quedé casi sin vos, no podía consolar a mi hija, hasta que me di cuenta que todavía tenía la cartera en mi hombro. Una vez que tomé conciencia solté la cartera y los ladrones salieron corriendo”, se lamentó.
“Mi marido llegó a los cinco minutos, salimos a buscarlos y no los encontramos por ningún lado”, finalizó la joven.
Sin muchas esperanzas, la mujer con su esposo fueron hacer la denuncia con el triste pensamiento que ese fue un hecho más de tantos que se vienen produciendo en la provincia y quedan a la deriva.
Porque como atestiguó la damnificada, ni siquiera pudo hacer un identikit de los delincuentes que tan abruptamente la atacaron, que es un dato fehaciente para que efectivos policiales realicen tareas de rastrillaje.
Este, fue otro lamentable hecho delictivo que muchas personas de forma casi recurrente están viviendo en las calles de la provincia.
