Según la agencia Xinhua, que cita como fuente al Comité Especial de Rescate, que encabeza el primer ministro Wen Jiabao, la cifra oficial de muertos este martes asciende a 11.921.
La provincia de Sichuán, hoy se recuperaba lentamente del caos dejado por el terremoto, aunque continúan cancelados todos los vuelos a la región y está cerrada la estación de trenes.
De acuerdo con la prensa local, cuatro de las cinco líneas ferroviarias que conectan la provincia quedaron destruidas.
Ayer un tren que viajaba desde Baoji a Chengu cargado con 13 tanques de petróleo descarriló y se incendió.
La agencia Europa Press informó por su parte que la región se quedó sin electricidad, ya que cinco centrales eléctricas y seis subestaciones quedaron afectadas tras el terremoto.
Mientras tanto, unos 1.300 efectivos de rescate llegaron hoy a la localidad de Wenchuan, también en la provincia de Sichuan, donde se derrumbaron institutos y escuelas.
El primer ministro chino, Wen Jiabao, visitó el lugar del desastre para coordinar los trabajos y lanzó un llamamiento a los equipos de rescate, a los que pidió que llegaran, aunque fuera a pie, a los lugares necesitados de auxilio.
Soldados del mando militar de Chengdu, según Xinhua, optaron por esta opción y salieron ya anoche hacia las zonas más afectadas.
En la ciudad de Mianzhu, al menos 10.000 personas permanecen desaparecidas.
En el lugar numerosos edificios se derrumbaron, entre ellos varios institutos, colegios y un hospital, pero aún son escasas las informaciones que proceden de esa región.
Además, un grupo de unos 15 turistas británicos permanece desparecido en la zona desde el momento del terremoto.(Telam)
