El objetivo de la Ordenanza 4776, aprobada en octubre de 2009, fue plantear “un reconocimiento cultural y turístico de la ciudad, a partir del análisis y evaluación de los recursos patrimoniales urbanos y naturales”.
Según indicó Peralta, se trata de una “propuesta integral de turismo para la Capital” y demandará “acondicionar un tramo de 1680 metros de longitud y dotarlo de infraestructura básica que atraiga inversiones turísticas”.