Fiesta: 4 de diciembre. El hecho de que no aparezca en el calendario litúrgico pos-Vaticano no significa que la Iglesia la haya descartado. Pero se ha querido dar lugar en la liturgia a otros santos cuyas vidas están mejor documentadas. Según el Misal Romano previo a 1970, su martirio ocurrió en Nicomedia bajo el emperador Maximinus Thrax.
Se le representa con manto rojo, cáliz de la sangre de Cristo, rama de olivo, corona y espada, todos ellos símbolo del martirio.
Es la patrona de la artillería, arquitectos, albañiles, fortificaciones, cavadores de tumbas, fundadores, revistas, y protectora contra el rayo, fuego, muerte repentina e impenitencia.
Tristemente, la religión de la Santería la ha tomado como uno de sus dioses lo cual nada tiene que ver con la auténtica veneración a la santa. Ella murió por ser fiel a nuestro Señor Jesucristo y por eso es testimonio para todos.