Los años transcurridos se disuelven y se funden con la masacre actual informada catódicamente por la CNN. Pero la matanza a la que ferozmente aluden estos "Ejercicios materiales", es como lo consignó el propio artista, de industria nacional.
Veinte esculturas de resina poliéster pigmentada trazan este "Apocalipsis criollo". Están fechadas entre 1978 y 1983. En su momento la serie marcó un quiebre fundamental con la estética que le valió la obtención del Premio De Ridder en 1976. Un quiebre que fue la respuesta visceral al tiempo de ignominia. (Télam)