Zara y Tom Doyle, ambos de 24 años, se percataron del problema de Connie cuando la chica tenía sólo un día de vida y le apareció una pequeña mancha roja en la punta de su nariz. Pero pronto la marca se expandió hasta medir 4 centímetros de diámetro, según el sitio inglés The Sun.
Los médicos que la trataron en su localidad natal, Slough, en la región inglesa de Berkshire, le diagnosticaron un tumor benigno pero decidieron no extraerlo para evitar el trauma. Sin embargo, para cuando Connie tenía tres años su madre notó que era demasiado tímida e introvertida a causa de las cargadas que recibía.
"Antes de la operación Connie era muy tímida y cuando la gente hacía comentarios y la señalaba ella daba vuelat la cara", comentó Zara. Al parecer, la protuberancia en la nariz de la pequeña se podía ver en los estudios prenatales que le realizaron a su madre desde la semana 26 del embarazo.
"Para cuando Connie tenía cuatro semanas de vida, su nariz era como la de un payaso y la marca de nacimiento crecía por fuera y dentro", explicó la mujer. Ese fue el momento de actuar.
Connie se convirtió en la primera bebé en recibir dosis de Propranolol, una droga utilizada para tratar problemas cardíacos en adultos y con el tiempo fue necesario meterla en el quirófano. Ahora, con sólo una pequeña cicatriz en su nariz, la chica está ansiosa por empezar pre escolar en septiembre.
Fuente: minutouno.com.ar
