Pasar demasiadas horas frente a una pantalla, agregó, está asociado con un aumento de los niveles de agresividad y del tamaño de la cintura. El estudio, publicado en Pediatrics, es el primero que evaluó en el tiempo cómo los videojuegos afectan la concentración infantil.
El equipo estudió a un grupo de más de 1.300 niños en edad escolar y, con ayuda de sus padres, registró la cantidad de horas frente a la televisión y el tiempo dedicado a los juegos durante un año.
Además, les preguntó a las maestras cómo se comportaban en la escuela y si tenían problemas para concentrarse en una tarea o, a menudo, interrumpían a los demás. Tras considerar los problemas de atención al inicio del estudio, los niños que miraban mucha televisión o jugaban con muchos videojuegos tenían más problemas de concentración en la escuela.
Los que pasaban más de dos horas diarias frente a una pantalla, que es el límite recomendado por la Academia Estadounidense de Pediatría, tenían un 67 por ciento más de posibilidad de superar el nivel promedio de los problemas de atención.
A veces, los casos extremos de los trastornos de atención llevan al diagnóstico del desorden por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), presente en entre el 3 y el 7 por ciento de los niños en edad escolar. El equipo no diagnosticó casos de TDAH.
Los autores también evaluaron a estudiantes universitarios con cuestionarios estandarizados para diagnosticar el TDAH. En aquel grupo, los que superaban las dos horas diarias de televisión eran dos veces más propensos a tener problemas de atención que el promedio, aunque no reunían los criterios del desorden.
Para Gentile, el efecto de la televisión y los videojuegos depende de varios factores y no es grave. "No todos los niños sufren problemas con el mismo tiempo de exposición, ni un solo factor modela nuestra conducta. Es una combinación de variables y los medios son apenas una", puntualizó.
Miriam Mulsow, que no participó en el estudio, no considera que la televisión o los videojuegos causen problemas de atención o TDAH. "Hay padres que hacen todo lo que pueden, pero tienen varios trabajos y no pueden pagar la guardería", dijo Mulsow, de la Texas Tech University, en Lubbock.
"Me preocupa más que piensen que le están causando TDAH a sus hijos. No creo que así sea ni que esos padres tengan que sentirse mal", opinó. De todos modos, agregó que "si un niño tiende a tener problemas de atención, sentarse frente a la televisión y no hacer ejercicio podría exacerbar la situación". Los niños no deberían mirar TV más de 2 horas por día, aseguró la experta a Reuters Health.
Fuente: Reuters
