La iniciativa había contado con la aprobación del Concejo Deliberante de ese distrito que enseguida declaró "de utilidad pública" la maquinaria, en tanto se esperaba que el gobierno provincial dictara igual medida para el edificio.
Los obreros, que imaginaban volver a elaborar cerca de 12 toneladas diarias de fideos cortos, ocuparon el edificio desde enero, cuando comenzaron a gestionar las pasos necesarios para lograr que las maquinarias abandonadas desde hace 19 años fueran expropiadas a su antiguo dueño para poder ponerlas en marcha.. (Télam)