Rubén Manzi y Pablo Sanchez candidatos a Gobernador e Intendente de la Capital respectivamente, se habían apersonado el mediodía de ayer en el Tribunal electoral para pedir lo que ya se estaba estudiando, la anulación de las elecciones.
El pedido de este partido minoritario se justificaba en la falta de garantías. Más allá de su presentación que hicieron formal por medio de un escrito, el Tribunal Electoral ya había estudiado el caso, lo que momentos más tardes se confirmó con el dicurso de Oscar Castillo y la desición de suspender definitivamente las elecciones, hasta nueva convocatoria.
Más tarde, Manzí rescato la desición tomada por el Gobierno, porque de esta manera se evitarían males mayores.