Tamaña dificultad se le presenta ahora al Ministro de Salud Arturo Aguirre, que no podrá continuar las negociaciones por el aumento salarial con los trabajadores de su área. la decisiòn de no aumentar los salariosen la provincia, y postergar todo tipo de desiganciones, salvo las de los funcionarios, fue tomada ayer en una reunión convocada por el primer mandatario, que ya empieza a ejecutar su programa.
Aguirre, que viene de una negociación con los trabajadores en huelga del Hospital San J. Bautista, integró ayer una reunión de gabinete con el Gobernador Brizuela del Moral, dónde expuso las últimas novedades del conflicto que perdura en su área. Las decisión que se tomó en torno a este aspecto en la primera reunión de Gabinete de esta gestión, no solo afecta a las áreas en pugna, como la de Salud, sino también a todos los sectores de la administración pública que aspiraban a la recomposición del salario, debido a la austeridad que se plantea como eje de la gestión de Brizuela del Moral, ratificadas ayer por el ministro Greco.
Lo que no se sabe es, que indicaciones recibió el ministro Aguirre por parte de su mandatario, para enfrentar el próximo lunes a los trabajadores que en este caso ya ratificaron la medida de fuerza. Además de la negativa al aumento salarial, el gobernador y sus colaboradores coincidieron en que tampoco habrá designaciones, salvo las de los funcionarios de gobierno, que aún no terminan de realizarse. Con esto, se termina de empeorar el panorama para el ministro Aguirre, que si el 5 de enero se presenta ante los trabajadores del Hospital, no podrá elucidar ninguno de los planteos de los huelguistas.
El plan de austeridad que por ahora imagina la gestión de Brizuela del Moral, prevé también censar todo el ámbito de la administración pública para determinar el número de empleados y sus salarios. Pero esta iniciativa, ya es vista con desconfianza por los empleados administrativos, puesto que cada vez que se habla de salarios en los últimos días no es precisamente para recomponerlo, sino todo lo contrario, por lo que habrá que adivinar la real intención de esta medida