Los malhechores habrían ingresado por uno de costados del predio, para lo cual rompieron el alambre perimetral y se dirigieron a las oficinas, donde sorprendieron a los guardias de seguridad, apuntándoles con las armas.
Uno de los empleados habría intentado resistirse y forcejeó con los asaltantes, pero fue golpeado con la culata del arma en el rostro, lo que le provocó una grave lesión y una importante hemorragia.
Una vez reducidos el personal de seguridad, los ladrones se apoderaron del dinero, que rondaría los $ 10 mil aproximadamente, y entre 2000 y 3000 dólares, además de algunas pertenencias de los empleados.
Cuando los asaltantes se dieron a la fuga, los empleados llamaron a la policía y efectivos de la comisaría Segunda y Décima se hicieron presentes en el lugar-
El empleado que estaba dentro de la oficina, perdía gran cantidad de sangre del rostro y fue necesaria una ambulancia para trasladarlo al hospital.
La División Investigaciones llevó a cabo un amplio rastrillaje, y en la parte posterior del predio hallaron una mochila y otros elementos, que supuestamente habían sido robados a los empleados y abandonados por los delincuentes.
Sin embargo no se logró encontrar las vainas servidas de los dos disparos al aire, que supuestamente habrían realizado los delincuentes, de acuerdo a los dichos de las víctimas.
Mientras tanto en el hospital de urgencias se informó que Alberto Arévalo, el empleado golpeado por uno de los delincuentes, presentaba un corte profundo en el rostro, aunque su vida no corría peligro.
