Los presos aceptaron restituir el manejo del penal a los jefes penitenciarios este domingo tras acordar con las autoridades una serie de puntos, entre ellos no recibir sanciones por el motín,informaron voceros penitenciarios.
De todas maneras, pese a que no hubo heridos y la revuelta finalizó en paz, las instalaciones carcelarias quedaron destruídas por la acción de los presos, que se amotinaron alrededor de las 19 de ayer.
El ministro de Gobierno, Carlos Carranza, informó sobre el final de las negociaciones y mencionó la muerte de un interno, aunque aclaró que no se trató de un participante del motín, sino de un preso que se encontraba en un calabozo de autodisciplina que estaba enfermo. ( Télam)