Osvaldo Reynoso y su primo Marcelo Reynoso fueron abordados por los hermanos Rodríguez durante la madrugada de aquella jornada de verano tras finalizar el baile del local bailable de la localidad Capayense. A ambos los golpearon ferozmente y los dejaron abandonados tras quitarles el automóvil.
Los dos están acusados de robo calificado por el uso desmedido de la violencia y por haber sido cometido en lugar despoblado y en banda.