Los malvivientes rompieron la puerta, entraron y revolvieron todo, luego de lo cual huyeron llevando consigo la caja registradora, aunque no la pudieron abrir.
En la fuga los ladrones arrojaron el botín a sólo unos metros del comercio, mientras la bocina persistente de la alarma continuaba sonando.
La policía llegó rápidamente al sector e inició un patrullaje por la zona, pero no se logró dar con los malvivientes.
Según contó la propietaria del local, Patricia Juri, la caja contenía en su interior una suma cercana a los 500 pesos en billetes de cambio.
