Pero vecinos que observaban la escena avisaron a la policía, por lo que un patrullero se dirigió rápidamente a la zona.
Los ladrones escaparon, dejando tirado el transformador en medio de la calle, con un derrame de aceite, por lo que se pidió colaboración a bomberos, ante el peligro de que la sustancia sea tóxica.
Los delincuentes lograron darse a la fuga.