Ese día, en la esquina de Yerbal y Bolivia, del barrio porteño de Flores, fue encontrado tirado en el suelo con una puñalada en el pecho el niño Gonzalo Jesús Torres (12), detallaron los voceros.
A raíz del hallazgo, la policía y una ambulancia del Same arribaron al lugar y establecieron que junto al chico herido se encontraba su madre, Patricia Nassel, quien les explicó que minutos antes, cuando su hijo mendigaba en la estación de trenes, había sido atacado a cuchilladas por otra persona que lo echó del lugar.
El chico herido fue trasladado al Hospital Piñero, donde murió a las pocas horas debido a la gravedad de las lesiones sufridas.
En tanto, en inmediaciones de la estación los pesquisas secuestraron una navaja manchada con sangre, presumiblemente empleada para cometer el crimen, que fue secuestrada en el marco de la pesquisa para ser sometida a peritajes.
Tras la muerte del niño, y en el marco de la investigación, efectivos de la comisaría 36 fueron a pedirle los datos a la madre de la víctima, momento en que advirtieron que la mujer había desaparecido del hospital.
Con el correr de los días, la policía se enteró de que Nassel había sido internada en una sala de primeros auxilios de la localidad de Moreno, cercana a su casa, a raíz de haber sufrido una intoxicación por la ingesta de paco, al que, según fuentes policiales, es adicta.
Ese dato, sumado a testimonios recabados en el marco de la causa, despertó sospechas en la fiscal de Instrucción 43, Felisa Krasucki, quien encomendó a los detectives de la División Homicidios de la Policía Federal que ahondaran la pesquisa.
Los detectives establecieron así que el ataque relatado por la madre del niño no había sido cometido por un chico sino por ella misma.
Es que según las fuentes, la persona que apuñaló al niño llevaba puesta una campera con capucha -ya que ese día llovía- y, si bien por la contextura física parecía un muchacho, un testigo la reconoció como la madre de Gonzalo Torres.
Un jefe policial consultado por Télam dijo que existen testimonios en la causa que indican que la madre solía agredir al niño en la estación, lugar al que lo mandaba a mendigar.
En base a las diversas evidencias, la fiscal ordenó un allanamiento en la casa de la mujer, en la localidad bonaerense de Francisco Alvarez, Moreno, donde la policía logró ubicarla y detenerla.
Las fuentes dijeron que la acusada no se resistió al arresto y que al momento de llegar la policía estaba en la casa con otros dos hijos menores de edad, que fueron puestos a resguardo.
Nassel quedó a disposición del Juzgado de Instrucción 23, a cargo de Ricardo Pinto, acusada de homicidio calificado por el vínculo, que prevé una pena de prisión perpetua.
Fuente: Telam
