Según el testigo, el empresario "se puso furioso y ordenó echar a Marcos Schenone de Dallas" cuando vio que el joven, asesinado minutos después durante una persecusión automovilística, se besaba con una chica que él pretendía, informaron fuentes del caso.
El declarante es una persona que aquella madrugada del 16 de enero estaba a sólo cinco metros de Conzi cuando escuchó cómo el dueño de Dallas "se enloqueció" cuando vio a ambos jóvenes besándose en su propio boliche de la localidad bonaerense de Martínez. (Télam)