El accidente ocurrido en plenas vacaciones veraniegas del 2000 provocó gran conmoción en todo el país, al punto que el Gobierno argentino, a cargo entonces de Fernando De la Rúa, dispuso los aviones Tango 01 y Tango 02 para que los familiares de las víctimas pudieran viajar hasta el lugar del accidente para reconocer los cuerpos. (Télam)