La línea 28 de colectivos, propiedad de la empresa DOTA, tiene varios ramales, entre ellos el que une el Puente de la Noria con Retiro, y otro que, con ese recorrido, ingresa a Villa Fiorito.
Para realizar ese recorrido las unidades bordean el Riachuelo por caminos conocidos como Carlos Pellegrini y Calle de la Ribera Sur, donde "se robaron hasta los postes de la luz del alumbrado de luces de mercurio" por lo cual atravesarlo al oscurecer "es todo una aventura" con peligro para la "seguridad de los pasajeros y choferes", dice un comunicado de los colectiveros. (Télam)