Pese al optimismo inicial, el Pentágono y el propio presidente norteamericano George W. Bush admitieron que las tropas aliadas encontraron una resistencia que no esperaban en su caminoa Bagdad.
En un episodio que jamás imaginaron vivir los jerarcas del Pentágono,diez soldados estadounidenses resultaron heridos, seis de ellos de gravedad, cuando al menos dos hombres intentaron asesinar a un comandante de las fuerzas estadounidenses en el campamentoCamp Pennsylvania, en el norte de Kuwait, según informó a la cadena CNN un periodista que se encontraba en el lugar.
En tanto, misiles estadounidenses alcanzaron por primera vez una zona residencial de Bagdad, donde redujeron a escombros siete viviendas y dejaron sin suministro eléctrico a la ciudad. (Télam-SNI)
