Tal cual se preveía y se venía manifestando en los últimos tiempos, las posiciones contra la guerra desatada por Estados Unidos fueron superiores a los apoyos, aunque tal vez el más sorprendente haya sido el de República Checa.
Luego de las afirmaciones hechas por el secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, incluyendo a República Checa entre los países que apoyaban el ataque, este jueves el presidente y primer ministro checo, Vaclav Klaus y Vladimir Spidla, respectivamente, lo desmintieron y aseguraron que su país "no forma parte de la coalición liderada por Estados Unidos".
En Latinoamérica, salvo Nicaragua y Costa Rica, todos los países manifestaron su rechazo a la iniciativa norteamericana contra Irak. (Télam-SNI)