El presidente del Colegio de Profesores, Jaime Gajardo, presente en el encuentro con el ministro de Educación, Felipe Bulnes, tampoco tuvo palabras esperanzadoras. “Fue una reunión díficil”, resumió mientras aún persistían los disturbios en algunas universidades, tras más de 10 horas de protestas. “Seguiremos movilizados”, agregó.
“Fue una reunión compleja, que al final terminó con un buen paso, que es tener una próxima reunión ya de trabajo el próximo miércoles”, declaró Bulnes, quien precisó que el primer asunto a discutir será la gratuidad de la educación. Al respecto, Vallejo dijo que “hubo tensiones, pero logramos hacer prevalecer una de nuestras demandas principales, que es la de la gratuidad, que va ser el principal tema que se discuta en la próxima reunión”.
Matizando las distancias, el portavoz del gobierno, Andrés Chadwick, primo del presidente Piñera, valoró el encuentro positivamente. “Creemos que ha sido muy importante que hayan existido las voluntades para efectos de aceptar esta convocatoria”, subrayó.
Estas negociaciones se presentan en un ambiente de desconfianza ciudadana hacia el gobierno y los partidos. Según sondeos de distinto signo, menos de 15% de los chilenos confía en el Poder Judicial o el Congreso. El apoyo a Piñera es de 22% y a los conglomerados opositores de 9%.
El gobierno y los estudiantes, con la amenaza de que miles de éstos últimos pierdan el año lectivo en colegios y universidades, continuarán las conversaciones el miércoles para tratar de resolver el problema de la gratuidad de la educación pública. Los jóvenes, que esperan lograr al menos educación universitaria gratuita para 60% de la población más pobre, reclaman por la inequidad del sistema educativo, heredado del gobierno de Agusto Pinochet.
A su vez, el gobierno, que encara comicios municipales en 2012 y presidenciales en 2013, sólo acepta otorgar becas para 40% de los universitarios más pobres, ofreciendo créditos con bajas tasas de interés para los demás.
Por ello, para muchos padres es más barato enviar a sus hijos a estudiar a otros países, como Argentina, donde la educación superior es gratuita.
Ayer por la mañana, en la ya tradicional marcha de los jueves —la de ayer fue la número 36— unos 150 mil estudiantes universitarios y secundarios, según la dirigente Vallejo, caminaron unas 25 cuadras. De momento no había una cifra oficial de participantes y de detenidos. Como en otras ocasiones, la marcha se desarrolló con tranquilidad, en medio de bailes, alegres coreografías y con estudiantes disfrazados. Pero cuando los primeros miles de estudiantes pasaron de largo el punto en que debía concluir la marcha, en la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Chile, se inició una fuerte represión policial.
Luego del día de marchas y choques con la policía, los estudiantes reiteraron su desconfianza de la autoridad.
“Es el colmo que se nos reprima de esa forma. Los carabineros (la policía militarizada) tendría que haber colaborado para guiar la manifestación y controlarla, pero no para reprimirla”, dijo Vallejo.
Fuente: 26noticias.com.ar