Buenos Aires, 2 de agosto (Télam-SNI, por Alberto Galeano).- En una escena de la película "El pianista", del director Roman Polanski, basada en la vida de Wladyslaw Szpilman, un grupo de judíos polacos construye una pared de ladrillos para cerrar una calle del ghetto de Varsovia, bajo la vigilancia de los soldados nazis.
Más de cincuenta años después, sin la maquinaria de exterminio lanzada por Adolf Hitler, el gobierno del primer ministro israelí, Ariel Sharon, levanta un muro de concreto y alambre electrificado para cercar el 40 por ciento de Cisjordania, con el fin de prevenir ataques terroristas palestinos.