"Hay gente que quiere ganar con la inflación", enfatizó el dirigente.
Álvarez reconoció que "en algunas panaderías porteñas hace rato que el pan está a 10 pesos" y que eso se debe "al miedo que quieren meter algunos con informaciones inventadas".
Respecto al pan a $ 2,5 por kilo acordado con el Gobierno, el panadero señaló que se puede sostener por las ganancias que se obtienen en otros productos.
"En las facturas, por ejemplo, hay un 300 por ciento de ganancia", dijo.
Sobre la harina subsidiada que entregan los molinos, Álvarez destacó que "el día que se termine el subsidio no se va a fundir ningún panadero".
Por último, afirmó que "hay rentabilidad en el sector" y puso como ejemplo las panaderías "que venden pan a los supermercados chinos, que luego comercializan a 4,5 pesos por kilo". (Telam)