River Plate, en el regreso de un hijo pródigo, Marcelo Salas, de apagada tarea, y la presentación de su nuevo equipo de estrellas, se desentendió de los lujos y sólo mostró tenacidad para lograr una angustiosa victoria sobre Nueva Chicago por 2-1, como local.
Por su parte Boca Juniors, el pentacampeón de América, sufrió también más de lo esperado, pero con un afortunado remate de Sebastián Battaglia sobre el epílogo del partido venció por 1-0 a Gimnasia y Esgrima, en La Plata. ( Télam)